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La represión militar en Birmania está peligrando la estabilidad y seguridad en toda la región. Lacciones policiales contra los manifestantes prodemocráticos son cada vez más crueles y el número de víctimas mortales está aumentando.
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La policía habría lanzado varios artefactos explosivos en la ciudad de Bago, dejando un número indeterminado de muertos. Por lo que los ejércitos étnicos habrían respondido con un ataque similar.
La Unión Europea reforzó sus sanciones contra la junta militar en el poder en Birmania, al incluir a otros 10 funcionarios y a dos empresas con fuertes vínculos con las Fuerzas Armadas.
Las muertes ocurrieron el viernes, pero solo se conocieron un día después. Según una organización, más de 700 personas han perdido la vida a manos de las fuerzas de seguridad desde el golpe militar de febrero.
Yuki Kitazumi, también cineasta, ya había sido arrestado varias horas en febrero pasado, cuando cubría protestas contra el golpe de Estado.