Alemania recordó a las víctimas del Holocausto

El Parlamento alemán instó hoy a defender la democracia, durante un acto que tuvo lugar en Berlín en conmemoración del Día Internacional de las Víctimas del Holocausto, que se celebra el 27 de enero coincidiendo con el aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz en 1945.

Norbert Lammert, presidente del Bundestag (Cámara baja del Parlamento alemán) recordó que Alemania "no es inmune a las aberraciones", dadas sus experiencias bajo la dictadura Nazi.

Según él, la subida al poder de Adolf Hitler hace exactamente 75 años no fue ni un accidente de la historia alemana ni algo inevitable.

En ese sentido, señaló que en Alemania, donde se tuvo que sufrir muchas "experiencias amargas" durante el nazismo, no puede permitirse ninguna forma de extremismo, racismo o antisemitismo.

"Es vergonzoso que en nuestro país sea necesario contar con una presencia policial permanente en los centros e instalaciones judías para protegerlos de ataques", continuó en su discurso, en el que estuvieron presentes el presidente federal, Horst Köhler, y la canciller Angela Merkel.

"Todos juntos nos opondremos a cada intento de ignorar nuestra asentada democracia, de burlarla, de minarla o atacarla", añadió Lammert.

Por su parte, la asociación de los ex presos de Auschwitz aprovechó la oportunidad para exigir al gobierno alemán que aumente sus ayudas económicas y proporcione un seguro a todas las víctimas del Holocausto, tanto de Israel, como de otros países.

La asociación envió una carta al ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrück, en la que recalcó que los alemanes tienen la obligación de asegurar una vejez digna a todas las víctimas de la barbarie nazi.

El domingo, fecha exacta de la liberación hace 63 años del mayor campo de exterminio nazi, el de Auschwitz, en Polonia, se realizarán minutos de silencio y se ofrecerá un programa de discusiones, conferencias y otras actividades en Berlín.

También se desarrollarán otros actos conmemorativos en los estados de Sajonia y Mecklemburgo-Antepomerania, donde el partido de extrema derecha NPD tiene representantes en sus parlamentos regionales.