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11S dejó con trastornos mentales a autor de tiroteo en EE.UU.

17 de septiembre de 2013

Aaron Alexis participó en rescates tras el atentado de Al Qaeda, episodio que lo marcó profundamente. Se desconocen las causas de su acción homicida.

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Imagen: Reuters

Aaron Alexis, el exreservista de la Marina de Estados Unidos acusado de la muerte de 12 personas en una base naval de Washington, padecía de paranoia y escuchaba voces, por lo que había buscado ayuda al menos dos veces en hospitales, así como en el Departamento de Veteranos de Guerra para tratar sus dificultades mentales, de acuerdo a diversos medios estadounidenses.

El hombre, de 34 años, habría participado en el rescate de las víctimas del atentado del 11 de septiembre de 2001, episodio que habría cambiado su vida. De acuerdo al testimonio entregado por su padre, desde entonces sufría trastornos atribuidos al estrés postraumático. Una amiga del presunto francotirador, Kristi Suthamtewakul, dijo en entrevista con CNN que Alexis “guardaba la ira contra los terroristas que mataron a inocentes”.

Pese a ello, lo describe como “muy educado, muy amable”, y apasionado por la vida. Las investigaciones no han hallado vínculos entre el reservista y alguna agrupación terrorista. Todo indica que el ataque, ocurrido la mañana del lunes 16 de septiembre, fue solamente la acción de un enfermo mental que actuó en solitario.

Pese a todo, licenciado con honores

Alexis trabajaba en un restaurante tailandés en Texas, donde dejó una buena impresión, y meditaba ocasionalmente en un templo budista, de acuerdo a información entregada por el diario The Washington Post. Entre mayo de 2007 y enero de 2011 sirvió como reservista de la Marina, de la que fue destituido tras ser advertido en ocho ocasiones por “comportamientos incorrectos”, según declaraciones de un miembro de esa institución.

El supuesto autor del tiroteo fue licenciado con honores el 31 de enero de 2011 porque así lo solicitó él mismo y porque, entonces, la Armada consideró que ese procedimiento sería más rápido que el necesario para poder licenciarlo sin esa distinción, algo que habría servido como advertencia sobre su comportamiento para sus futuros empleadores.

Alexis contaba con una tarjeta de identificación que lo acreditaba como funcionario externo para un proyecto informático de la Marina. Gracias a ese documento, pudo ingresar al recinto de la Comandancia de Sistemas Navales sin levantar sospechas. Si bien inicialmente la policía pensaba que existían otros dos tiroteadores, finalmente se mostró convencida de que Alexis estuvo solo en la masacre.

El secretario de Defensa, Chuck Hagel, y el jefe del Estado Mayor, Martin Dempsey, recordaron a las 12 víctimas mortales depositando este martes (17.09.2013) una corona en una ceremonia ante la estatua “The Lone Sailor”, que simboliza a los servidores de la Marina. El del lunes fue el peor tiroteo en una base militar estadounidense desde el ataque de Fort Hood en noviembre de 2009, donde el psiquiatra militar Nidal Hasan mató a 13 personas e hirió a decenas. Hasan fue condenado a muerte el mes pasado por un jurado militar.

DZC (dpa, Europa Press)

Tiroteo en instalación militar en Washington