Un modelo de cooperación: ¿también para Asia?
6 de enero de 2005
El canciller federal alemán hizo la propuesta hace una semana atrás. La idea es que no sólo fluyan fondos, sino también simpatías humanas.
El modelo es practicado desde 1982 por el Estado federado de Renania-Palatinado, en el suroeste de Alemania, y Ruanda, en el centro de África. Y con mucho éxito.
En Renania-Palatinado, la cooperación con Ruanda es parte de la cultura política.
Desde un comienzo no fue vista como un intercambio de gentilezas y atenciones. Por el contrario, se basa en el compromiso concreto de ciudadanos de ambos estados.
Para quienes en iglesias o clubes, asociaciones o empresas de Renania-Palatinado ocupan un puesto de responsabilidad, pero también para los escolares y sus padres, Ruanda no es un país perdido en algún lugar de África.
Escolares trabajan para proyectos
Desde 1982, Renania-Palatinado ha fomentado más de 1200 proyectos, que no es poco, con unos 48 millones de euros, de los cuales aproximadamente el 20% provino directamente de los bolsillos de los ciudadanos.
Los últimos dos veranos, 60.000 escolares trabajaron sendos días con el solo fin de donar los ingresos para proyectos en Ruanda. Sólo así fueron reunidos casi 1,3 millones de euros.
Casi cincuenta municipios, más de 230 escuelas y doce instituciones, entre clubes y fundaciones, mantienen contactos con contrapartes ruandesas.
Resultados admirables
Con los proyectos cooperan también la Asociación Deportiva de Renania-Palatinado, las universidades de Maguncia y Coblenza-Landau e innumerables particulares.
Los resultados son admirables: fueron construidas nueve escuelas y numerosas otras recuperadas, cuadernos y lápices de Renania-Palatinado coadyuvan a que, en comparación con otros países africanos, Ruanda tenga una alta tasa de alfabetización y se ayuda a desarrollar centros de salud.
La cooperación es acompañada por tres coordinadores alemanes que trabajan en Kigali. Éstos aseguran que pozos de agua horadados con ayuda de Renania-Palatinado no se cieguen y que las tuberías de agua funcionen correctamente.
Una suave presión
Karl Peter Bruch, responsable de la cooperación con Ruanda en el ministerio del Interior de Renania-Palatinado, dice que a veces también es necesario ejercer una suave presión sobre la elite política ruandesa.
"Sólo esfuerzos permanentes pueden impedir que logros en la infraestructura se pierdan nuevamente", agrega.
Por ello, representantes de ambos gobiernos se reúnen regularmente. Y también en Maguncia, la capital de Renania-Palatinado, se sigue con preocupación que Ruanda lleva a la práctica una política agresiva en relación con su vecino Congo.