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Sexo en Alemania: porno, aborto y sexo precoz en Internet

José Ospina Valencia / Agencias18 de septiembre de 2008

Jana tenía 12 años cuando hizo sexo por primera vez. Jessie lleva a los 17 años, 51 amantes hasta el momento. Y la madre de Hendrik está orgullosa de que su hijo esté por conseguir un trabajo como actor porno.

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Berlín: la capital del sexo duro... e inseguro.Imagen: picture-alliance/Tagesspiegel

Estas historias de vida son sólo algunos ejemplos del nuevo libro "La tragedia sexual de Alemania" que se presentó este 18 de septiembre en Berlín. En él, los autores Bernd Sigglekow y Wolfgang Büscher advierten acerca de una juventud sexualmente precoz e hipersexualizada que ya no es capaz de establecer relaciones. La central federal de educación sexual (BZgA) no pone en duda los casos individuales, pero no lo considera un fenómeno de masas.

La última encuesta representativa sobre sexualidad juvenil en Alemania más bien alivió a los investigadores. Sólo el 10 por ciento de los chicos y chicas afirmó haber debutado sexualmente a los 14 años o antes. Después de que la edad de la "primera vez" bajó hasta los años 90 cada vez más, los valores se mantuvieron relativamente constantes desde 2000, indica la portavoz Marita Völker-Albert.

Niños de 8 años que ven porno con sus padres

Bernd Siggelkow, fundador de la organización de ayuda "Arche" (Arca) de Berlín pinta una imagen completamente distinta. Los niños de "Arche" suelen proceder de familias en las que las madres no tienen trabajo y los padres desaparecieron. En treinta "historias verídicas", en las que se modificaron los nombres, Siggelkow cuenta de niños de ocho años que ven películas porno con sus padres o de adolescentes de 14 años que le presentan amantes a sus madres.

Siggelkow criticó que muchas madres ya transmitieron a los niños cuando apenas tienen diez años que el cuerpo es el capital más valioso. Es así como el sexo en grandes cantidades se convierte en la medida del éxito en la vida. A esto se suman las páginas web sexuales en Internet o las películas porno breves que se transmiten por teléfono móvil. "Los niños ni siquiera pueden asimilar toda esta información sexual", dijo Siggelkow. "La brecha entre la madurez sexual corporal y espiritual es cada vez mayor". Como consecuencia, teme más actos violentos y una generación incapaz de relacionarse.

Porno por Internet

La asociación federal de asesoramiento sexual Pro Familia no cuenta con investigaciones a nivel federal, pero sí con determinados estudios individuales sobre pornografía. En una encuesta representativa realizada en el estado federado de Renania-Palatinado en 2006, el 60 por ciento de los jóvenes entre 11 y 18 años afirmó conocer las películas porno de Internet. Las reacciones van desde el asco hasta el interés. Un trabajador social dijo que los jóvenes suelen sentirse aliviados cuando se enteran de que las películas porno no representan la realidad de las relaciones sexuales.

A Bernd Siggelkow le gustaría poder repartir teléfonos móviles con los que los niños sólo puedan realizar llamadas telefónicas. Pide más instalaciones para jóvenes y límites al uso de Internet. Lo que ve en "Arche" sigue impresionándolo. Hace poco comprobó que un grupo de niños ya no jugaba a las escondidas, sino a mantener sexo grupal. Ocho niños se tiraban de a uno sobre una niña.

Abortos no aumentaron

Según el libro, la contracepción es para los jóvenes de "Arche" una palabra desconocida. Creen que las gaseosas tibias o correr una vuelta a la manzana ayudan a evitar embarazos. Siggelkow advierte por eso acerca de más embarazos adolescentes. Sin embargo, los números de la oficina federal de estadísticas no apoyan sus afirmaciones. En 2007, 733 chicas de 15 años o menores dieron a luz en toda Alemania. Se trata del número más bajo desde 2000. El número de abortos no aumentó.

Sin embargo, la central federal de educación sexual no considera las observaciones de Siggelkow sacadas de la nada. "Es un problema de toda la sociedad, sobre todo en los barrios más problemáticos socialmente", dice la portavoz Völker-Albert. En las familias más humildes hay problemas con el alcohol, las drogas, el consumo de los medios y la alimentación, y también con la sexualidad. "Sin embargo, no hay un estudio serio que demuestre una tendencia hacia el abandono sexual", afirma.

Bernd Siggelkow, ex pastor del Ejército de Salvación, tampoco ve su libro como un estudio, sino más bien como una instantánea estremecedora. Muchos de los niños de "Arche" desean para el futuro tener su propia familia, con padre, madre, casa y auto. Estos mismos sueños suelen ser destruidos por las propias madres: "Eso es para otros", les dicen.