Nuevo comienzo requiere corregir errores cometidos bajo Bush
5 de noviembre de 2008
Rzeczpospolita, de Varsovia, Polonia: “Desde Lisboa hasta Karachi, los pueblos habían dejado de creer en las buenas intenciones de Estados Unidos y George Bush contribuyó mucho a ello. Barack Obama empero, goza, por adelantado, de una gran confianza de que él pronto logrará recuperar el tiempo perdido para los Estados Unidos.
Para ello son necesarios sólo unos pocos pasos. El comienzo del retiro definitivo de Irak podría ser el primero. Otra de las señales podría ser el cierre de esa nociva cárcel que es Guantánamo y la prohibición de la tortura.
Por último, unas cuantas palabras gentiles sobre el papel geopolítico de Europa y la lucha contra el cambio climático no harían daño.”
Subsanar los errores de Bush
Lausitzer Rundschau, de Cottbus, en el Este alemán: “Bajo la administración de George Bush Jr. hubo una cantidad de instituciones y empleados oficiales que cometieron hechos considerados como crímenes. Entre ellos se cuenta el trato de prisioneros, el asesinato de personas civiles ajenas a los terroristas, el secuestro en terceros países y la extradición.
Dependerá del próximo inquilino de la Casa Blanca si habrá consecuencias a los mencionados desmanes. De si el próximo presidente podrá o no, también depende de falta hacer una evaluación de los hechos ocurridos. La crisis financiera, así como la guerra en Irak y en Afganistán dan suficientes oportunidades para evitar la evaluación de los errores que es necesaria. A largo plazo empero, un nuevo comienzo no será posible sin tener en cuenta con los errores cometidos bajo el Gobierno del último Bush.”
Ola de admiración por Obama… y de desprecio por Bush
Westdeutsche Allgemeine Zeitung, de Essen, en la Cuenca del Ruhr: ¿Quién mejor antibush que este jovial político de 47 años? – Negro, buen mozo, elocuente y gentil. Sin el desprecio por Bush no existiría tampoco la ola de admiración por Obama.
Su pertenencia al partido republicano es la causa de la falta de respeto que se siente frente a John McCain en Europa. McCain es muy parecido a Bush, por lo menos desde la lejanía. En Europa causa sorpresa tanto la gran admiración desatada por Obama, como el hecho de que los mismos estadounidenses hubieran sido los mismos que eligieron a Bush dos veces.”