No es revolución, pero es naranja: el Día del Rey en Holanda
Como cada año, este 27 de abril se celebró la fiesta nacional más importante de los Países Bajos: el Día del Rey o Koningsdag. En 2017, el festejo tuvo connotación especial por el 50 aniversario del rey Willem-Alexander.
Una celebración especial
Cada 27 de abril, los holandeses celebran su fiesta nacional: el Koningsdag o Día del Rey. En 2017, el festejo tuvo un tono particular: el rey Willem-Alexander cumple 50 años de edad. Pero el monarca también tiene otros motivos para el júbilo; por ejemplo, las altas calificaciones que los holandeses otorgan a la familia real, en especial a la reina Máxima, nacida en Argentina.
Más que un desfile
El punto culminante del Koningsdag es el desfile de la familia real por las calles de Ámsterdam. Es tradición que la población porte por lo menos una prenda de color naranja. Esto es visto como una oportunidad para cientos de comerciantes que ponen sus puestecillos sobre las aceras y venden productos alusivos al Día del Rey.
Globos por doquier
Otro motivo común son los globos naranja, con los cuales la ciudad de Ámsterdam se adorna desde los días previos al Koningsdag, e incluso después del desfile. Los puestos callejeros también se cubren con los redondos motivos que resaltan el color naranja. En cambio, los colores de la bandera holandesa, rojo, blanco y azul, prácticamente brillan por su ausencia.
Día de asueto
Gran parte del comercio establecido de la ciudad cierra sus puertas con motivo del Día del Rey. Pero la medida no es general. Sobre todo los establecimientos gastronómicos de Ámsterdam aprovechan para colmar el hambre y la sed de cientos de miles de paseantes. Claro, a cambio de una módica cantidad.
Entusiasmo por el Día del Rey
No es algo raro dentro del panorama de Amsterdam durante el Día del Rey: personas de la tercera edad caminan por las calles de la ciudad y celebran ataviadas de naranja a su monarca. Pero el festejo no es exclusivo de los más veteranos.
Una fiesta para las generaciones
La juventud holandesa también celebra con entusiasmo el Koningsdag. La víspera del festejo está marcada por la música y la euforia de miles de jóvenes. Se calcula que tan solo el Día del Rey las calles de Ámsterdam reciben a 750.000 visitantes procedentes de Holanda y de otros países, en lo que es uno de los grandes acontecimientos masivos de Europa.
El sabor de la popularidad
La popularidad de la familia real se refleja en algunos productos típicos de Holanda, como este queso holandés homónimo de la reina y añejado una década. En 2017, el Día del Rey en Holanda tuvo el sabor de la tradición, y el colorido de la fiesta máxima de los Países Bajos.