Michel Houellebecq, provocación encarnada
El autor francés se dio a conocer internacionalmente en 1998 con su novela “Las partículas elementales”, pero pocos saben que, aparte de la literatura, Michel Houellebecq recurre a otros medios para expresar sus ideas.
El provocador
Fumar es sólo una de sus compulsiones, admite el francés Michel Houellebecq. Escribir es otra de ellas. Su primera colección de poemas, “La búsqueda de la felicidad”, fue publicada en 1991 y su primera novela, “Ampliación del campo de batalla”, en 1994.
Con la mirada en el abismo
Los poemas y las novelas de Houellebecq suelen destacar, con un toque de morbidez, las tensiones interpersonales y los puntos de ruptura social. Lo mismo se puede decir de su trabajo fotográfico, que busca la belleza en representaciones que pueden resultar visceralmente repulsivas. Como muestra, su pieza “Espagne #005”.
Bonjour tristesse
En 2016, la sala Palacio Parisino de Tokio presentó una serie de fotografías tomadas por Houellebecq. Titulada simplemente “Francia”, la muestra incluía imágenes como ésta: una calle solitaria conduce hacia la costa atlántica en un día nublado. Su aura melancólica es compartida por muchas de las fotos, los poemas y los libros de Houellebecq. La Francia triste es uno de sus temas recurrentes.
El desierto como objeto de contemplación
Los espacios con escasos signos de vida humana, como el retratado aquí en “Espagne #009”, parecen fascinar a Houellebecq. Con su cámara, el artista escruta los sitios más inhóspitos, sean estos edificios de concreto en las afueras de París o terrenos baldíos en el norte de España.
Sombría paleta
Las sombrías tonalidades que aparecen recurrentemente en las imágenes de Houellebecq acentúan el aura ominosa de los motivos que el artista fotografía. No obstante, en otros trabajos, él recurre a una paleta cromática más brillante, chocante. Houellebecq le dijo una vez al diario suizo “Neue Zürcher Zeitung” que a él le fascinaba “la poesía de lo repugnante”.
Libros controversiales
Varios de sus libros han dado pie a controversias en Francia. Como muestra, un botón: la novela “Sumisión” ha sido percibida como una coartada para defender, bajo la bandera de la libertad de expresión artística, los mensajes islamófobos del autor, en un momento en que las comunidades musulmanas de los países occidentales están siendo difamadas sin que su derecho a réplica sea respetado.
Las últimas palabras
Harto de que se le “enjuicie” tras cada entrevista, Michel Houellebecq anunció en la Feria del Libro de Fráncfort 2017 que dejaría de concederlas. El autor habló por última vez con el semanario alemán “Der Spiegel” sobre Francia, Alemania, la literatura y la religión. Houellebecq comentó que estaba trabajando en una nueva novela, pero no dijo cuándo sería publicada.