Luchando por el Caribe

Objetivo del proyecto: crear zonas de protección y de veda para la pesca para asegurar la captura a largo plazo y garantizar con ello la biodiversidad.

Tamaño del proyecto: las slas del Caribe: Santa Lucía, Granada, San Vicente y las Granadinas, Antigua y Barbuda, San Cristóbal y Nieves, y Dominica.

Implementación: talleres para la administración marina y la población local de las islas del Caribe; establecer ancladeros fijos para barcos de buceo y turismo; adquirir redes biodegradables; introducir métodos de pesca sostenibles, así como nuevas fuentes de ingresos para los pescadores, por ejemplo, a través del turismo.

Presupuesto del proyecto: 4.000.000 de euros.

Biodiversidad: por ejemplo, el caracol trompeta, la langosta o el mero gigante.

Texto:
Las islas de San Cristóbal y Nieves, en el mar Caribe, están separadas por tan solo cuatro kilómetros. Esta proximidad da lugar a muchos conflictos. Cruceros, barcos de pesca y taxis acuáticos ocupan la zona. Al mismo tiempo, el agua poco profunda entre las islas es el caldo de cultivo ideal para tortugas, langostas, caracoles trompeta y meros gigantes.

Como consecuencia el ecosistema está en peligro, ya que es muy fácil que se produzca un desequilibrio. El grupo ecologista The Nature Conservancy ha puesto el área bajo protección especial, con el apoyo económico de la Iniciativa Internacional para el Clima. La idea es crear una "zona de exclusión marítima" en la que esté prohibida la pesca, pero no el turismo. Las amarras estarán diseñadas para evitar la destrucción de los corales por parte de las embarcaciones de buceo. Los pescadores, a su vez, podrán faenar en otra zona habilitada para ese fin. En estos momentos, los ecologistas están formando a los pescadores en la mejora de su pesca.

Un videoreportaje de Julia Henrichmann