Cuestión de fe - El programa de la Iglesia

Tailandia es uno de los destinos turísticos más apreciados por su riqueza cultural y sus fascinantes paisajes. Pero este país en el sureste asiático es también un referente mundial del turismo sexual y las consecuencias de ello son nefastas: más de un millón de tailandeses han contraído el virus del sida.

Cuando llegaron a Tailandia los primeros Misioneros del Verbo Divino, en 1999, constataron que el virus de la inmunodeficiencia humana, VIH, además de ser mortal, dejaba a muchos niños huérfanos. Por si fuera poco, muchos de ellos son portadores del virus y por ello suelen ser rechazados incluso por sus propios familiares. Atender a estos niños es la tarea que se ha impuesto el hermano Bernd, un enfermero de profesión.