Cerveza con sabor a tequila

Antes de empezar, una aclaración importante: Alemania sigue siendo una nación de fieles consumidores de cerveza. Pero las cifras de venta bajan. En el 1980, el consumo por habitante se cifraba en 146 litros anuales, mientras que ahora el término medio ha bajado a sólo 123 litros. A los más jóvenes ya no les gusta tanto la cerveza pura. ¿Y qué hace la industria para adaptarse a sus gustos? Inventa nuevos productos con una imagen juvenil y cool.

Imagen rancia de la cerveza

Según encuestas llevadas a cabo por las cervecerías, son tres las causas de la caída de la demanda: una imagen añeja de la cerveza, por ser la bebida de los padres y abuelos, el sabor amargo y el alto grado de alcohol que contiene. Las cervecerías reaccionaron, ofreciendo mezclas de cerveza con bebidas dulces como la Coca Cola. Estas bebidas se preparaban a mano, pero ahora que existen embotelladas, es más fácil venderlas también en las discotecas, donde gozan de gran popularidad.

La estrategia de la industria incluye que, de este modo, los nuevos clientes se adapten al sabor de la cerveza - y acaben aceptándola también en su estado puro. Dr. Volker Kuhl, gerente de marketing de la cervecería Veltins, indica en una entrevista con la revista técnica "deutsche getränke wirtschaft" que sólo el 15 por ciento de los consumidores de las cervezas mezcladas también beben cerveza pura, el 85 por ciento viene de otras bebidas.

Otra novedad es la cerveza aromatizada. Contiene el mismo grado de alcohol, pero no es tan amarga: existe una cerveza llamada "Desperados", que sabe a tequila, otra se llama "Volt" y tiene aroma de Vodka. Según el Instituto de Estadísticas alemán, el porcentaje de estas nuevas cervezas (mezcladas y aromatizadas) en el total de las ventas de cerveza alcanzó ya un 2,6 por ciento a finales del año 2002, lo que representa un crecimiento del 27 por ciento con respecto al tercer trimestre del 2001.

A mezclar

Igual que las cervecerías, la industria de bebidas espirituosas también ha registrado pérdidas en sus ventas, desde 1980 un cuarto del total. Su receta para combatir la crisis es la misma: mezclar, mezclar, mezclar. Uno de los grandes productores es Bacardi. Gracias a su nuevo producto "Rigo" (Bacardi, limón y agua mineral) tiene un creciente volumen de ventas, muy superior a las expectativas, como señala el diario "Die Welt am Sonntag". Hasta el momento, las ventas de estos cócteles prefabricados se elevan a sólo un uno por ciento del total del mercado de la cerveza, pero las cifras de venta crecen.

La OMS (Organización Mundial de Salud) critica que la industria intenta convertir a los niños en bebedores habituales, arraigando muy temprano el hábito de beber alcohol regularmente. Para ellos el problema consiste en que la mezcla de ron o vodka con jugos naturales y azúcar tiene por consecuencia que uno ya no se da cuenta de la cantidad de alcohol que ingiere. Aun cuando la juventud siempre lo ha mezclado todo, el problema radica en que ahora estos experimentos están a la venta.