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Estadio sin policía

Daniel Martínez14 de septiembre de 2013

A partir de este fin de semana y hasta nueva orden, la policía no estará presente en el estadio de Gelsenkirchen durante los partidos locales del Schalke. La medida ha desencadenado un intenso debate en Alemania.

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La policía en el estadio del Schalke en Gelsenkirchen, una escena que quizás no se repita en el futuro.
La policía en el estadio del Schalke en Gelsenkirchen, una escena que quizás no se repita en el futuro.Imagen: picture-alliance/dpa

La decisión se tomó durante una sesión del parlamento federal. Ralf Jäger, ministro del interior del estado de Renania del Norte-Westfalia, dentro de cuya jurisdicción se encuentra Gelsenkirchen, fue el encargado de darla a conocer. Esta, por ahora, solo afecta al Schalke, pero en el futuro también podría extenderse a otros estadios de la región donde se juegan partidos de la Bundesliga, entre ellos Dortmund, Leverkusen o Gladbach.

“La policía, hasta nueva orden, no se volverá a hacer presente en el estadio. La seguridad es responsabilidad del club. La Policía estará fuera de las instalaciones del evento, en un recinto cerrado, lista para actuar cuando se le requiera. Si se presenta una situación de peligro para la vida y bienestar de terceros, naturalmente intervendrá”, declaró públicamente el funcionario.

La disputa con Schalke

De esta forma, la policía reacciona a las críticas que surgieron debido a su intervención durante el partido de la ronda clasificatoria para la Champions League entre Schalke y el equipo griego Paok Saloniki. Entonces las fuerzas del orden arremetieron en la tribuna de las barras bravas del club alemán para, según explicaron, prevenir una pelea entre las aficiones que podría haber derivado en una posible tragedia.

La riguroso de su actuación, que llegó a incluir el uso de gases lacrimógenos, fue objeto de rechazo. En algunos círculos de opinión fue calificada incluso como “violencia policíaca” y, oficialmente, el Schalke la repudió. “No se puede considerar un socio de confianza a quien no está en capacidad de garantizar la seguridad de sus aficionados, solicita la intervención de la policía y luego critica públicamente su forma de actuar”, dijo el ministro Jäger sobre la posición adoptada por el club de fútbol, según recuerda la agencia de noticias SID.

Aunque el Schalke juega este fin de semana fuera de casa, el próximo miércoles recibe en Gelsenkirchen al Estrella Bucarest de Rumania, en partido valido por la Champions League, y luego le visitará el Bayern Múnich en la fecha seis de la Bundesliga. Estos podrían ser los primeros dos partidos de una nueva era en el fútbol alemán, en la cual la policía se retira de los estadios y los clubes la remplazan con sus propios agentes de seguridad.

Ralf Jäger, ministro del interior del estado de Renania del Norte-Westfalia, retiró a la policía del estadio del Schalke. "La seguridad es responsabilidad del club. Ralf Jäger, ministro del interior del estado de Renania del Norte-Westfalia, retiró a la policía del estadio del Schalke. "La seguridad es responsabilidad del club. La Policía estará fuera, lista a actuar cuando se le requiera".
Ralf Jäger, ministro del interior del estado de Renania del Norte-Westfalia, retiró a la policía del estadio del Schalke. "La seguridad es responsabilidad del club. La Policía estará fuera, lista para actuar cuando se le requiera".Imagen: picture-alliance/dpa

Voces a favor y en contra

Pero el estadio del Schalke no es el único que la policía planearía abandonar, si continúa su difícil relación con los aficionados del fútbol en Alemania. Dortmund, de acuerdo con información a la prensa del vocero de las fuerzas del orden de la ciudad, Wolfgang Wieland, podría ser el segundo escenario futbolístico del estado de Renania del Norte-Westfalia sin agentes de la seguridad estatal. Otros estadios de la región podrían ser los siguientes.

La policía considera que con lo que ha sucedido en torno al Schalke, la complicada relación de “necesidad y desconfianza” con el fútbol ha tocado fondo. Ya en el pasado el sindicato de la policía cuestionó la utilización de entre 200 y 300 agentes por partido de la Bundesliga a costa del erario público. En el 2012, de acuerdo con cálculos del sindicato, se gastaron más de 100 millones de euros en la seguridad de un espectáculo que genera dinero a entidades privadas, como lo son los clubes profesionales de fútbol.

Las directivas de la Bundesliga, sin embargo, prefieren recordar que el fútbol paga anualmente millonarias sumas en concepto de impuestos (719 millones de euro en el 2012), razón por la cual, es para ellas algo natural poder contar con la policía en los partidos. “Ahora no pueden decir que no van a los estadios simplemente porque hubo un problema”, reclamó en la televisión alemana el funcionario del Maguncia Christian Heidel.

Las opiniones están divididas. Mientras algunos consideran que la policía debe tener presencia en los estadios, otros sostienen, esgrimiendo argumentos jurídicos, que solo está obligada a acudir en caso de peligro, pero no a velar por la seguridad dentro de las instalaciones del evento. Esta, por ejemplo, es la norma en Suiza, donde la policía permanece fuera de los estadios durante los partidos de fútbol.