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Actuar antes de que sea tarde

La entrevista fue realizada por Dagmar Engel31 de mayo de 2004

El ministro alemán del Medio Ambiente, Jürgen Trittin, asegura que la protección de la naturaleza no está reñida con los intereses económicos, en entrevista con DW-TV.

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El ministro del Medio Ambiente sigue remando contra la corriente.Imagen: AP

Jürgen Trittin, el ministro alemán de Medio Ambiente, no tiene una tarea fácil. El político de Los Verdes ha debido tragar más de una píldora amarga, por ejemplo en lo tocante a la regulación de las emisiones contaminantes, que Alemania reducirá en un grado muy inferior al deseado por los ecologistas. El imperativo económico prevaleció claramente en este caso. Poco antes de iniciarse en Bonn una conferencia internacional sobre energías renovables, el ministro conversó con DW-TV.

DW: Señor ministro, vamos directamente al asunto: Cuando escasea el dinero, ya nadie se interesa por la protección del clima. Aparte de Usted,¿hay una sola persona en el gobierno alemán que realmente siga interesándose por la protección del medio ambiente?

JT:Pienso que sí, porque la protección del clima es precisamente uno de los pocos ramos a los que les va bien en Alemania. En los últimos años hemos podido crear decenas de miles de puestos de trabajo en el ámbito de las energías reciclabes. Entretanto, 120 mil personas trabajan en este sector. En una ciudad como Magdeburgo, por ejemplo, ya es el mayor empleador industrial.

DW: 120 mil nuevos puestos de trabajo en los últimos años es un balance positivo. Sin embargo, comparándolo con la cifra total de desempleados ya no parece tanto. Y la constante crítica de la industria es que las imposiciones medioambientales encarecen la producción. Si Usted quiere convencer a un inversionista que debe quedarse aquí o que debe venir a Alemania. ¿Qué le diría?

JT: Naturalmente 120 mil es poco en relación con la tasa de desempleo. Pero si Usted se fija en el hecho de que ya son más que los que trabajan en la industria nuclear y del carbón conjuntamente, se da cuenta de que se trata de un ramo importante. Y mirando más allá de las energías renovables, llegamos a la cifra de unos 1.3 millones de empleados que, de manera directa e indirecta, trabajan en los sectores medio ambiente, servicios, vigilancia de medio ambiente, eliminación de residuos etc. Los altos estándares en materia medioambiental, que ahora ya valen para toda la Unión Europea, han conducido a abrir nuevos mercados mundiales a las empresas alemanas que se dedican a este sector.

DW:Y ya no queremos en Alemania a un inversionista que no lo entienda así y no quiera invertir en ello, sino en una empresa ineficiente desde el punto de vista de su alto consumo de energía...

JT: No, creo que quien trabaja en la política energética y no es eficiente ya no tiene ninguna posibilidad en el mercado mundial. Se demuestra que son precisamente los altos grados de eficiencia que hemos desarrollado en nuestros ámbitos los que nos fortalecen en la competitividad mundial. Y por eso el viejo cuento de que la ecología se contradice con una política de creación de polos industriales es una contradicción en sí. Sobre todo en Alemania, un país pobre en recursos naturales y con costos laborales elevados debido al nivel de vida. Y si pregunta usted a la propia industria, verá que dijeron lo mismo acerca del catalizador. Cuando el catalizador fue obligatorio por ley, de pronto dijeron que les había proporcionado un impulso considerable y esta experiencia la vivimos una y otra vez en materia de ecología. Primero quejas y luego apuntarse al éxito de la política ecológica con laureles industriales.

DW: La protección de la naturaleza es algo que está bien visto. Cuando uno viaja por Alemania, y ve la gran cantidad de espacios verdes y que el agua está limpia, notamos que realmente se ha logrado mucho en los últimos 20 años. La protección del medio ambiente es complicada, cuesta dinero y lleva mucho tiempo. ¿Cómo se puede hacer para interesar y llamar la atención sobre temas como las energías renovables y el cuidado del medio ambiente a personas que tienen más en cuenta la difícil situación económica que la urgencia ecológica?

JT: Se necesita tender puentes. De hecho hay un problema de base, que es el cambio climático. Este es el tema de la película "El día después de mañana", que trata justamente de cómo impedir una catástrofe semejante antes de que sea demasiado tarde. Cuando ocurre algo así ya no se puede aprender la lección. En la película, el presidente llega a esa conclusión. Por eso hay que adelantarse a las eventualidades.

DW: A principios de junio se celebrará la conferencia internacional sobre energías renovables en Bonn, Alemania. De cara a conferencias de este tipo los temas se acuerdan previamente y luego hay un comunicado de cierre en el que se define algún objetivo. ¿Hay para esta conferencia un objetivo concreto?

JT: Si queremos vencer la pobreza mundial, tenemos que facilitar en los próximos años a por lo menos mil millones de personas el acceso a la energía. Esta es la línea central a la que apunta el programa de acción que pretendemos acordar en Bonn. Esto supone medidas que posibiliten aplicar de forma masiva las nuevas tecnologías, como la instalación en la próxima década de plantas de energía térmicosolar, es decir, plantas que utilizan la luz del sol para producir vapor, con el cual se produce energía eléctrica. Nuestro objetivo es aprobar un plan de acción factible.

DW:¿Y serán vinculantes?

JT: Queremos hacerlo de tal modo que el año 2006 o 2007 las Naciones Unidas puedan mirar qué se ha hecho en el marco de la comisión para desarrollo sostenible, y comprobar en qué medida han sido compromisos sellados en la conferencia. Es decir, no queremos una declaración de principios, sino un plan de acción orientado a la negociación, con un monitoreo internacional.

DW: ¿Espera pues un éxito mayor que el obtenido en Río?

JT: Creo que, en comparación con la cumbre de Johannesburgo, hemos realizado un enorme avance. Porque tendremos a todos aquellos que en Johannesburgo aún mostraban reticencias. Tendremos a Estados Unidos, a Arabia Saudita... Si Ud. viaja hoy por Estados Unidos, y va por Nuevo México o California, podrá comprobar que se está haciendo mucho en materia de ecología. Porque también allí han comprendido que existe una era después del petróleo, y que es mejor estar preparados para cuando llegue.